Toxoplasmosis y embarazo

Toxoplasmosis y embarazo

La toxoplasmosis es producida por un parásito, Toxoplasma gondii, que infecta a casi todas las especies de sangre caliente, incluido el ser humano. En las personas , suele ser subclínica, es decir, sin síntomas, a no ser que se trate de una mujer embarazada sin contacto previo con el parásito. En este caso, puede producir graves consecuencias en el feto. Si la mujer ha tenido contacto previo con el parásito, no habrá ningún riesgo, ya que la inmunidad de la madre, protegerá al feto. Es una de las primeras pruebas que realizan los médicos en una mujer gestante. Si se confirma el riesgo, algunos médicos recomendarán alejarse del gato, vamos a intentar aclarar si es necesario.
El gato es el hospedador definitivo, es decir, sólo en él se producirá la liberación de ooquistes (huevos) al exterior a través de las heces. Estos ooquistes o huevos, para que tengan la capacidad de infectar, necesitan un mínimo de 24horas en el exterior. Las heces de gato recién eliminadas, no suponen riesgo real de contagio. Además, si el gato es infectado, liberará ooquistes en las heces durante 1 a 3 semanas. Después, quedará como portador, pero no eliminará huevos, por tanto, a partir de ese momento, no supone riesgo para las personas.

Síntomas

La gran mayoría de los gatos, no muestran síntomas en el momento de la infección. Cuando se pueden observar, es con la infección avanzada, que puede dar lugar a quistes en diversos órganos.
Los signos clínicos en el gato, son principalmente respiratorios, debidos a neumonía, produciendo dificultad para respirar. También se pueden dar signos oculares, musculares o nerviosos.
Un gato enfermo puede no tener síntomas o ser leves.

Tratamiento

La toxoplasmosis en gatos, es una enfermedad poco frecuente, sobre todo en gatos domésticos, debido a los hábitos alimenticios más controlados. Para la infección en el gato, es necesario que ingiera carne cruda o aguas no controladas que pudieran estar infectadas.
En el caso de que ocurra, incluso cuando desarrolle síntomas, existe tratamiento a base de antibióticos específicos que resulta eficaz en el gato.

Prevención

Como en muchos casos, es lo más importante de esta enfermedad, sobre todo por su relación y riesgo con el embarazo.
Los gatos preferentemente alimentarlos con comida comercial. Si se les da cualquier otro alimento ,cocerlo a altas temperaturas durante 10 minutos o congelarlo a -20º durante dos días.
En cuanto al contagio en mujeres embarazadas por contacto con las heces de un gato infectado, es poco probable. Las evidencias científicas demuestran que la gran mayoría de los contagios, se producen por ingestión de carne poco cocinada o su manipulación, ingestión de vegetales contaminados no lavados adecuadamente o por contacto directo con suelos contaminados.
En cuanto al gato, para que pueda contagiar, primero es necesario que tenga toxoplasmosis, que no es frecuente y que podemos confirmarlo con análisis. Después, que esté eliminando ooquistes por heces, que se produce sólo durante un tiempo, y por último que permanezcan las heces más de 24 horas en el exterior para que tenga capacidad de infección.
Por tanto, si es negativo a toxoplasmosis, no alimentamos a nuestro gato con carne cruda, limpiamos las heces todos los días y además con guantes, nuestro gato no será la fuente de infección.
Incluso en el caso improbable que nuestro gato sea positivo a toxoplasma, no indica si está eliminando huevos en ese momento. Las medidas higiénicas adoptadas son la que previenen el posible contagio.